Las anchoas son un producto típico de la gastronomía española, pero no en todas partes del país se consumen de la misma forma. Hoy os mostramos cómo se disfruta de este alimento en sus diferentes Comunidades Autónomas.
Una de las tapas más típicas de Murcia es la marinera murciana. Se trata de ensaladilla rusa presentada sobre una rosquilla de pan alargada y adornada con una anchoa encima. Los ingredientes para la ensaladilla son los típicos: patatas y huevos hervidos, pepinillos y zanahorias en vinagre, y atún, todo cortado a trocitos pequeños y mezclado junto con mayonesa. El toque murciano de la rosquilla de pan y la anchoa al final es un añadido que hace que este plato sea aún más rico. ¡Es una delicia!
Un plato clásico de la cocina catalana es el famoso pan con tomate. Aunque esta tapa se come por sí sola – pan tostado rascado con ajo, untado con tomate y aceite de oliva y sal- en realidad también se utiliza como base para cualquier tipo de embutido, queso, e incluso conserva de pescado como el bonito del norte y las anchoas de Santoña.
Una tapa típica de Andalucía, en concreto de Jaén, es el recluta. Consiste en un picatoste (pan frito en aceite de oliva) con rodajas de tomate y con filetes de anchoa. También se puede comer como bocadillo, añadiendo otro picatoste encima. Se trata de una combinación de ingredientes muy simple pero deliciosa que recomendamos fuertemente probar. ¡No os arrepentiréis!
Una de las tapas por antonomasia del País Vasco es la gilda, un pintxo hecho de piparras, aceitunas y filetes de anchoa. Se dice que el pintxo como tal se originó en el bar “Casa Vallés” en San Sebastián a finales de los años 40. El nombre se le dio por su similitud a la protagonista de una película muy famosa en aquel momento llamada “Gilda”, una mujer encarnada por la actriz Rita Hayworth, pues al igual que ella, lucía “verde, salada, y un poco picante”.
No podíamos no mencionar a Cantabria, pues las anchoas de Santoña son su producto autonómico por excelencia. En esta región las anchoas se pueden consumir de muchos modos, aunque no es raro ver como en los bares son consumidas “tal cual”, directamente de la lata con unos palillos, disfrutando de la exquisitez de su sabor sin ninguna alteración.
Como veis, parte de la riqueza de nuestra gastronomía está en las mil formas de poder integrar un mismo alimento en diferentes platos, proporcionando una gran variedad de opciones gastronómicas. Estos son sólo algunos modos de cómo se consumen las anchoas en diferentes partes del país, aunque existen muchas más. Vosotros ¿con cuál os quedáis?
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39740 Santoña (Spain)
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